Creo que ha llegado el momento de cambiar de mentalidad. Mirar el futuro y preguntarme a mí mismo ¿Qué estoy haciendo por el pobre oso polar? o ¿Qué futuro voy a dejar si sigo contaminando como lo estoy haciendo hasta ahora?
Bien, pues todo eso queda atrás. Soy consciente de que cuesta de creer pero un nuevo yo "eco" ha surgido en mí, me explicaré:
No es que tenga ataques de demencia y vaya a sustituir mi moderno y cómodo medio de transporte por algo creado a mediados del siglo XVIII que no sirve absolutamente para nada, no señor.
Mi magneficiencia no conoce literalmente límites, y ahora a todos los que me acusan de ir en coche a todos los sitios les puedo decir, sí lo hago, pero contamino muchísimo menos que la construcción de un carril bici o que un enorme y pesado autobus. Gracias a unas pequeñas modificaciones ahora puedo circular con él con gas licuado del petróleo o mayormente conocido como GLP.
Sus ventajas son, menor contaminación, mayor duración del motor, ver sonreír a los hippis, etc...
Si todavía no te has creido todo lo que acabo de escribir, enhorabuena, porque realmente no lo he hecho por eso sino simplemente porque es mucho más barato este combustible. Ojo, no se me malinterprete, me parece muy bien eso de cuidar el medioambiente y llevar una pegatina en el coche que ponga "eco"; pero cada vez que le pongo combustible necesito ir al baño unos minutos...
Afortunadamente ya no le da un bocado a mi bolsillo cada vez que reposto en una estación de servicio, simplemente sonrío y digo "cómo me gusta la ecología"
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